La crisis de TVN no se resolverá bajando el sueldo a técnicos y profesionales

por La Nueva Mirada

LA CRISIS DE TVN NO SE RESOLVERA BAJANDO EL SUELDO A TECNICOS Y PROFESIONALES

Por Lorena Donoso, Manuela Gumucio

En Reportajes de El Mercurio, el nuevo Presidente del Directorio de TVN, Bruno Baranda, se explaya sobre las primeras medidas que está tomando para abordar la crisis. Plantea reducciones de salarios y distintas salidas financieras. Nada dice sobre la crisis de contenido del Canal. Solo menciona el éxito del Festival de Talca, como un soplo de esperanza para mejorar los índices de audiencia, pero nada sobre un cambio de visión sobre los contenidos.

De paso, la nota dice que el gobierno considera que se debe reducir en un 20 % el gasto de mano de obra. Probablemente esta expresión desafortunada para referirse a técnicos y profesionales de un medio de comunicación es un simple exabrupto, pero también puede reflejar la visión exclusivamente economicista sobre la crisis y el quehacer del Canal.

De paso, la nota dice que el gobierno considera que se debe reducir en un 20 % el gasto de mano de obra. Probablemente esta expresión desafortunada para referirse a técnicos y profesionales de un medio de comunicación es un simple exabrupto, pero también puede reflejar la visión exclusivamente economicista sobre la crisis y el quehacer del Canal.

En Chile somos asiduos a culpar al legislador por las deficiencias a que nos vemos enfrentados en casi todos los ámbitos.  Esto que puede ser, a menudo, cierto, no ocurre en el caso de  TVN.  Si en algo se ha avanzado es con el régimen jurídico del canal. De hecho, la ley 21.085 de 03 de abril de 2018, amplió el objeto del canal público en extremo.

Hoy en día TVN podría dar servicios de telefonía, TV cable, TV on demand por Internet – estilo Netflix – radiodifusión sonora, todo eso además de su tradicional giro como empresa de televisión abierta, pudiendo aprovechar todas las ventajas de la sociedad de la información. Siendo así, ¿cómo es posible que se encuentre sumida en una crisis tan profunda como la que se ha hecho evidente estos últimos años? Estimamos que la empresa no ha sido capaz de aprovechar sus ventajas en los ámbitos mencionados.

Hoy en día TVN podría dar servicios de telefonía, TV cable, TV on demand por Internet – estilo Netflix – radiodifusión sonora, todo eso además de su tradicional giro como empresa de televisión abierta, pudiendo aprovechar todas las ventajas de la sociedad de la información. Siendo así, ¿cómo es posible que se encuentre sumida en una crisis tan profunda como la que se ha hecho evidente estos últimos años? Estimamos que la empresa no ha sido capaz de aprovechar sus ventajas en los ámbitos mencionados.

Dentro de las razones de este fracaso, a nuestro juicio, es crítico que no se haya modificado el gobierno corporativo del canal, que fue una de las propuestas largamente perseguidas por Fucatel que finalmente no llegó a puerto, primando el cuoteo político en la selección de los directores, con escasos criterios asociados a las competencias creativas, profesionales, técnicas y económicas que requiere una empresa de esta magnitud y relevancia.

El precio que debemos pagar todos los chilenos es alto. Hoy en día la parrilla programática, además de ser anquilosada sigue prisionera de equilibrios políticos pequeños, restando frescura e interés a los programas informativos, con escasos aportes a una visión alternativa a la TV comercial,  que justifica la existencia de un   canal público. El área dramática que antes brilló no sólo por las ganancias que reportaba al canal, sino por sus aportes al debate de temas contingentes, hoy en día languidece. Los noticieros no dan cuenta de la realidad informativa diversa de nuestro país y el rating es esquivo para un canal que tiene cobertura en el 98% del territorio nacional.

El precio que debemos pagar todos los chilenos es alto. Hoy en día la parrilla programática, además de ser anquilosada sigue prisionera de equilibrios políticos pequeños, restando frescura e interés a los programas informativos, con escasos aportes a una visión alternativa a la TV comercial,  que justifica la existencia de un   canal público. El área dramática que antes brilló no sólo por las ganancias que reportaba al canal, sino por sus aportes al debate de temas contingentes, hoy en día languidece. Los noticieros no dan cuenta de la realidad informativa diversa de nuestro país y el rating es esquivo para un canal que tiene cobertura en el 98% del territorio nacional.

De nuestra parte consideramos que TVN no puede morir, debe modernizarse pero no en el sentido de una optimización financiera, sino profesionalizar su administración, innovar en los formatos, generar nuevos negocios con la potencialidades que le ha dado su ley orgánica, constituirse en un referente y locomotora de la transición a la era digital, como esperábamos cuando defendimos que se ampliara su giro.

De nuestra parte consideramos que TVN no puede morir, debe modernizarse pero no en el sentido de una optimización financiera, sino profesionalizar su administración, innovar en los formatos, generar nuevos negocios con la potencialidades que le ha dado su ley orgánica, constituirse en un referente y locomotora de la transición a la era digital, como esperábamos cuando defendimos que se ampliara su giro.

Nota: El art. 1 de la ley 19.132, vigente, dispone:

“Su objeto es establecer, operar y explotar servicios de televisión y de producción, emisión y transmisión de contenidos audiovisuales y de radiodifusión, cualquiera sea su formato, plataforma audiovisual o medio.

En general, podrá realizar todas las actividades propias de una concesionaria de servicios de telecomunicaciones, de televisión, de radiodifusión sonora, de servicios intermedios de telecomunicaciones y de servicios audiovisuales, con iguales derechos, obligaciones y limitaciones.

La empresa, a través de la programación de sus señales y el desarrollo de sus actividades y las de sus filiales, deberá velar por la efectiva realización de su misión pública, que incluye promover y difundir los valores democráticos, los derechos humanos, la cultura, la educación, la participación ciudadana, la identidad nacional y las identidades regionales o locales, la multiculturalidad, el respeto y cuidado del medio ambiente, la tolerancia y la diversidad.”

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