Por Sergio Campos
El refrán “la procesión va por dentro” es perfectamente aplicable a la realidad chilena de los últimos años. Eso si la conjugación verbal habría que cambiarla. “La procesión IBA por dentro”.
El gobierno de Piñera, con un norte equivocado, actuaba como si la sociedad estuviera muerta, insensible a sus políticas públicas de laboratorio, que a estas alturas el Chicago boys de Pinochet, Rolf Lüders, reconoce en BBC. Fue pupilo de Milton Friedman, el máximo exponente del «neoliberalismo», fue su director de tesis.
Demás está hablar en detalle del alza de los pasajes, de las jubilaciones miserables, de los trabajos extenuantes, de la mala educación con un servicio de salud ineficiente, el abuso en los más diversos ámbitos, la corrupción y la injusticia.
El descontento de los chilenos se estuvo fraguando lentamente, pero sin pausa. Con una clase política desconectada de la realidad y con un gobierno empecinado solo en el crecimiento de la economía sin mirar la inequidad donde los pobres y vastos sectores medios de la población están excesivamente endeudados sin expectativas de mejorar su calidad de vida.
El descontento de los chilenos se estuvo fraguando lentamente, pero sin pausa.
El ex ministro de la dictadura critica el hecho de privilegiar absolutamente el crecimiento y así a la reducción de la pobreza sobre la disminución de la desigualdad…es decir la teoría de chorreo. Reconoce en los abusos a todo nivel, el origen de la furia expresada multitudinariamente, y la “falta de calle” de la elite, que gobierna actualmente. Eso no excluye por supuesto a las dirigencias opositoras, más preocupadas de su reelección parlamentaria o de candidaturas presidenciales o de gobernadores regionales.
Los problemas sicológicos y psiquiátricos entre los chilenos provocados por la angustia y la ansiedad son alarmantes.
Los problemas sicológicos y psiquiátricos entre los chilenos provocados por la angustia y la ansiedad son alarmantes.
En el día mundial de la salud mental, a comienzos de octubre se rebeló que en Chile una persona se suicida cada cuatro o cinco horas.
En el día mundial de la salud mental, a comienzos de octubre se rebeló que en Chile una persona se suicida cada cuatro o cinco horas.
El médico psiquiatra Roberto Amon (el día antes del estallido social) dijo en Cooperativa que la atención de una persona en crisis puede demorar semanas y meses. En decir el remedio puede llegar demasiado tarde.
Para el especialista, los efectos del trastorno de ansiedad y angustia entre los chilenos y en su vida laboral son evidentes porque «1 de cada 5 adultos presenta esta condición y la ansiedad conlleva muchos síntomas físicos como molestias musculares, dolor de cabeza, el paciente se somete a una mayor cantidad de exámenes innecesarios y se baja la productividad laboral porque se está mal, preocupado y aumenta también el ausentismo laboral».
Esta procesión que va por dentro, ningún político ni menos el gobierno la habían considerado como variable, que deriva de la forma de vida impuesta por un sistema de desigualdad que nos coloca entre los países con la cancha más dispareja.
La evidencia más notable es que por la izquierda brotó el Frente Amplio, que abrigó cierta esperanza, pero detrás de eso está el 50% del electorado que decidió no votar.
Mal hacen aquellos que pretenden justificar la no participación comparándonos con Estados Unidos, donde poca gente vota.
Por la derecha surge el estilo ultra de Bolsonaro, con su expresión populista. Mal hacen aquellos que pretenden justificar la no participación comparándonos con Estados Unidos, donde poca gente vota.
Chile era un país con 80% de participación en las urnas. Sin duda que canjear el binominal por voto voluntario fue otros de los errores del mundo político.
Chile era un país con 80% de participación en las urnas. Sin duda que canjear el binominal por voto voluntario fue otros de los errores del mundo político.
Así como exigimos derechos a la salud, la educación, a mejores salario y jubilación digna, deberíamos restituir el deber de votar con el sufragio obligatorio.
Cuando nos encontramos en la encrucijada político social es hora de pensar en los caminos para encontrar la paz de los espíritus. Pero no basta el deseo. Se requiere acción y el “pacto social”, sugerido por algunos protagonistas de la política es una ruta auspiciosa.
Se necesita la representación de la sociedad civil. Y para ello deben crearse herramientas constitucionales que permitan la formación de instancias participativas que sean vinculantes. Donde se pongan todas las cartas sobre la mesa. Se han sugerido los cabildos del modelo francés que podría ser un camino entre otras alternativas.
¿Qué hacer? Y ¿cómo hacerlo? Está claro que no basta con los partidos y el gobierno. Se necesita la representación de la sociedad civil. Y para ello deben crearse herramientas constitucionales que permitan la formación de instancias participativas que sean vinculantes. Donde se pongan todas las cartas sobre la mesa. Se han sugerido los cabildos del modelo francés que podría ser un camino entre otras alternativas.
Pero, en definitiva, estamos en la hora de reflexionar y actuar, sí, actuar con la rapidez que se requiere para canalizar el grito desesperado de la sociedad, que ya ha provocado tanto dolor con muertos, heridos y ultrajados sexualmente.
actuar con la rapidez que se requiere para canalizar el grito desesperado de la sociedad, que ya ha provocado tanto dolor con muertos, heridos y ultrajados sexualmente.
Aparte de la destrucción material con la violencia aguda, que ha tenido como protagonista a grupos extremos minoritarios en distintos lugares del país.
Estoy impactado por las marchas multitudinarias en varias regiones, después de los anuncios presidenciales que a todas luces parecieron insuficientes. Para Don Francisco, de extensa trayectoria en la comunicación…las prioridades están claras, una vida humana vale más que cualquier supermercado…)
DERECHOS HUMANOS
Las violaciones a los derechos humanos merecen capítulo aparte. Perpetradas por agentes del estado, durante el estado de emergencia y el toque de queda. Después del levantamiento del estado excepción los protocolos policiales tienen poco y nada de realidad. Aparte de la responsabilidad institucional, políticamente el gobierno aparece en el foco de la crítica de los organismos como el Instituto Nacional de los Derechos Humanos como de la Comisión Chilena de los DDHH, que preside el abogado Carlos Margota, que ha dicho: “Nosotros estamos aquí horrorizados frente a la reiterada represión, con muertos, torturados, gente que han perdido la vista, heridos y miles de detenidos, represión contra manifestantes, ciudadanos y ciudadanas, pacíficamente».
UNA NUEVA CONSTITUCIÓN PARA CHILE
El clamor ciudadano en las calles y los sondeos de opinión pública colocan en los primeros lugares de las demandas, una nueva constitución para Chile.
Para el abogado constitucionalista Javier Couso, Piñera, que a su juicio es rey de la letra chica, ha sido ambiguo en esta materia.
El jurista dijo en Radio Cooperativa: «el Presidente debiera ser claro ante el país, ¿está realmente dispuesto a establecer un proceso para una nueva Constitución o quiere jugar con la palabra de que va a ‘cambiarla’ vía reformas puntuales? Esa estrategia ha fracasado para resolver el problema constitucional, llevamos 30 años parchando una Constitución que sigue siendo un problema».
En la misma línea respondió a aquellos que dicen que una nueva Constitución no va a mejorar los sueldos ni la salud.
En la Constitución se estable hoy que existirán administradores de fondos de pensiones privados y públicos. Si se quisiera suprimir o cambiar las AFP, sería inconstitucional. En la carta fundamental vigente se habla de salud privada y pública, de esa manera cualquier cambio estructural a las ISAPRE, podría ser inconstitucional.
También mencionó entre otros ejemplos el caso de los empleados públicos, que carecen del derecho de huelga. Es decir, son trabajadores de segunda clase en relación a los privados.
Entre las aberraciones de la actual constitución mencionó la intención del gobierno de recurrir al Tribunal Constitucional (TC), en 16 materias distintas. Es decir, el TC opera como tercera cámara legislativa para beneplácito de la derecha y el gobierno, cuando el parlamento, donde es minoría, opera en sentido contrario al Ejecutivo.
Es decir, el TC opera como tercera cámara legislativa para beneplácito de la derecha y el gobierno, cuando el parlamento, donde es minoría, opera en sentido contrario al Ejecutivo.
LA OPOSICIÓN POLICROMÁTICA
Los partidos que controlan ambas ramas del Congreso Nacional están lejos de constituirse en una sola voz frente la realidad del país.
La evaluación de los chilenos hacia sus parlamentarios es deplorable. En el último tiempo han operado “cada uno para su santo” y ni siquiera hay coherencia interna en sus partidos. Por una parte, está la diversidad del Frente Amplio, por otra los socialistas enfrascados en una reyerta interna, división incluida. La Democracia Cristiana expresa matices que la han conflictuado con la exNueva Mayoría de la que fueron parte en el gobierno de Bachelet.
La evaluación de los chilenos hacia sus parlamentarios es deplorable.
Una señal positiva podría ser el acuerdo borrador suscrito por los senadores Carlos Montes, Ricardo Lagos y Jorge Pizarro con el ministro de Hacienda para abordar la reforma tributaria, donde el 1% más rico aportará con impuestos al erario nacional y no al revés donde ese sector privilegiado de la sociedad recibía 800 millones de dólares que supuestamente invertirían creando empleos y crecimiento económico.
Lo claro es que el sistema de AFP seguirá viento en popa, con utilidades monstruosas para las empresas que manejan nuestras platas. En septiembre, obtuvieron utilidades por 500 millones de dólares.
Falta ver la manera como se destraba el cambio en el sistema de pensiones, cuya precariedad al final de la vida, se ha transformado en una experiencia dolorosa. Lo claro es que el sistema de AFP seguirá viento en popa, con utilidades monstruosas para las empresas que manejan nuestras platas. En septiembre, obtuvieron utilidades por 500 millones de dólares.
Si se logra mejorar la pensión básica solidaria, como pretende el gobierno, esta quedará el $132.000, bajo la línea de la pobreza. Un pequeño cambio para que todo siga igual.
En esta hora de incertidumbre, mucha gente, mucha, me pregunta que va a pasar. Mi respuesta es categórica: con la premura necesaria, los dirigentes en todos los niveles están llamados a reflexionar y actuar como ocurrió en tantos momentos de la historia reciente.
La procesión que iba por dentro salió a la superficie y contagió a miles de chilenos y extranjeros en varias capitales del mundo.
El derecho de vivir en paz es uno al que nunca debemos renunciar, pero todo indica que Chile seguirá siendo dos Chile: El 1% que se come el 30% de torta (PIB) y un 99% que en forma desigual se repartirá el 70%.