El estoicismo poético de Pedro Lastra

por La Nueva Mirada

Para muchos un genio poético silencioso. Un testigo privilegiado y de activa pluma en la creación literaria durante más de sesenta y cinco años. Escritor, poeta, ensayista, editor y profesor. Realizó sus estudios en la Escuela Normal de Chillán y en la Universidad de Chile. En su facultad de Filosofía y Educación se desempeñó como docente e investigador de literatura chilena entre 1960 y 1972.

Desde 1972 y hasta 1994 fue profesor de literatura hispanoamericana en la Universidad del Estado de Nueva York en Stony Brook, designado Profesor Emérito en 1995. Miembro de número de la Academia Chilena de La Lengua y, también, miembro correspondiente en Chile de la Academia Peruana de La Lengua. Actualmente dirige la Revista Anales de Literatura Chilena de la Universidad Católica en nuestro país.

Su extensa trayectoria poética está registrada en numerosos libros, desde la década del 50 del siglo pasado hasta Poesía Completa (Valparaíso 2016). En enero de 2019, con notables ilustraciones de Mónica Lihn(Enrique Lihn, gran amigo de Lastra, prologó y seleccionó poemas para un libro publicado bajo el mismo título en 1984) se ha publicado (Editorial Pfeiffer) “Pedro Lastra/ Cuaderno de la doble vida”, dedicado a su recientemente fallecida esposa (“A Irene Mardones Campos, siempre igual a sí misma”)

Como destaca en su presentación Marcelo Pellegrini, el verso de Lastra está marcado virtuosamente por la duda, lo indefinible, lo sigiloso, con una sosegada meditación sobre el tiempo, asociada a una reflexión sobre la muerte. Destaca el presentador: “La poesía de Pedro Lastra es una partitura musical compuesta para que se interprete sin estrépito y con disimulo, a la sordina”.

De “CUADERNOS DE LA DOBLE VIDA”

Ya hablaremos de nuestra juventud

Ya hablaremos de nuestra juventud
ya hablaremos después, muertos o vivos
con años fantasmales, que no fueron los nuestros
y días que vinieron del mar y regresaron
a su profunda permanencia

Ya hablaremos de nuestra juventud
casi olvidándola,
confundiendo las noches y sus nombres,
los que nos fue quitado, la presencia
de una turbia batalla con los sueños.

Hablaremos sentados en los parques
como veinte años antes, como treinta años antes,
indignados del mundo,
sin recordar palabra, quienes fuimos,
dónde creció el amor, en qué vagas ciudades habitamos

Tiempos sombríos

Un día de marzo de 2008, en algunos
periódicos de USA apareció una fotografía del
Presidente Bush corriendo en los jardines de la
Casa Blanca con un mutilado de la guerra de Irak

No invento nada, digo lo que veo
en esta fotografía, y veo que sonríe
feliz el Presidente, mientras corre
seguro de sí mismo
porque él es quien es,
por un prado elegante y muy cuidado
junto al hombre que ha perdido sus piernas
en una acción de guerra y ahora arrastra,
con qué torpe alegría,
su muñón de una pierna,
la prótesis de otra.

Imagen de estos tiempos
de sombría memoria
esta fotografía

Visiones reales

Asistir al regreso de los viejos amigos
sintiéndolos pasar
como si fueran parte del sueño de los otros,
y verlos detenerse un instante, un solo instante,
impacientes por seguir un camino

Reunión de familia

Padre y madre me visitan en sueños, me dicen:
estás enfermo, hijo, muy enfermo,
ten calma todavía, un poco de paciencia,
ya todo pasará.
Descansarás en aquella planicie
que desde aquí se ve.
Caminaremos juntos, y pronto llegaremos
a su verde confín

UNA MANO SE POSA EN MI HOMBRO Y ME LLAMA

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