Control policial a menores: Piñera saca las castañas con la mano del gato

por La Nueva Mirada

Sebastián Piñera abusa de la frágil memoria de los chilenos, con demagogia sustentada en la ilusión de encuestas favorables.

El intento de legalizar el llamado “control preventivo de identidad”, atendiendo a que ya se realiza masivamente- como certifica el estudio de la Universidad Diego Portales, fue aplicado, con pobres resultados, a más de 70 mil menores en los dos últimos años– ciertamente no es sólo un muy débil intento para disminuir la delincuencia y respaldar la cuestionada imagen de la policía uniformada.

El intento de legalizar el llamado “control preventivo de identidad”, atendiendo a que ya se realiza masivamente- como certifica el estudio de la Universidad Diego Portales, fue aplicado, con pobres resultados, a más de 70 mil menores en los dos últimos años – ciertamente no es sólo un muy débil intento para disminuir la delincuencia y respaldar la cuestionada imagen de la policía uniformada.

Parlamentarios oficialistas especulan con las cifras, acentuando el estigma juvenil, ahora infantil (control desde los 14 años), a partir de los mediáticos lanzazos y asaltos violentos protagonizados por jóvenes delincuentes, prometiendo una cuidadosa y controlada aplicación por parte de Carabineros. No se trata de darles “un cheque en blanco” afirman desde el ministerio de Andrés Chadwick. Si alguien conoce de procedimientos policiales y sus efectos en menores es el empoderado jefe de gabinete.

No se trata de darles “un cheque en blanco” afirman desde el ministerio de Andrés Chadwick. Si alguien conoce de procedimientos policiales y sus efectos en menores es el empoderado jefe de gabinete.

Están frescos en la memoria numerosos casos de violencia policial contra menores en los últimos años (bastaría mencionar el caso Catrillanca, múltiples manifestaciones de estudiantes y recientemente en Valparaíso el 8M). Valga el punto para focalizar la atención en los objetivos silenciados del bullado  proyecto con que Piñera desafía al parlamento.

Poco han informado los medios de comunicación del forzado cambio de protocolos de acción de Carabineros (publicado recientemente en el Diario Oficial) que debió instruir Chadwick luego de reiterados escándalos por represión policial.

Poco han informado los medios de comunicación del forzado cambio de protocolos de acción de Carabineros (publicado recientemente en el Diario Oficial) que debió instruir Chadwick luego de reiterados escándalos por represión policial.

La pretensión del gobierno no tiene nada de ingenua. El control preventivo está destinado a inhibir la movilización social de jóvenes, particularmente de estudiantes, que vienen cuestionando masivamente las políticas oficiales con un efecto asumido forzosa y tardíamente por una miope elite en las instituciones del Estado.

La pretensión del gobierno no tiene nada de ingenua. El control preventivo está destinado a inhibir la movilización social de jóvenes, particularmente de estudiantes, que vienen cuestionando masivamente las políticas oficiales con un efecto asumido forzosa y tardíamente por una miope elite en las instituciones del Estado.

El control policial, con las conductas represivas más que conocidas y cuestionadas por amplios sectores sociales que la conocen en carne propia, abre un nuevo flanco para debilitar los derechos ciudadanos. Con los bríos de siempre, José Antonio Kast denuncia debilidades de la propuesta presidencial, demandando acentuarla con la aplicación de estados de excepción añorados por los nostálgicos de la dictadura.

El control policial, con las conductas represivas más que conocidas y cuestionadas por amplios sectores sociales que la conocen en carne propia, abre un nuevo flanco para debilitar los derechos ciudadanos. Con los bríos de siempre, José Antonio Kast denuncia debilidades de la propuesta presidencial, demandando acentuarla con la aplicación de estados de excepción añorados por los nostálgicos de la dictadura.

Ciertamente los sectores más privilegiados de nuestra sociedad pueden aminorar los efectos de la medida, como lo expresan las propias autoridades. Cómo cuestionar una arbitrariedad policial que no conocen en carne propia? A lo más una incomodidad, con la ilusión de que la publicitada medida inhibirá la delincuencia cotidiana.

Cómo cuestionar una arbitrariedad policial que no conocen en carne propia? A lo más una incomodidad, con la ilusión de que la publicitada medida inhibirá la delincuencia cotidiana.

Falsa ilusión. Las cifras ya comentadas (Estudio UDP) ratifican lo que los propios delincuentes pueden eludir, como ocurre hoy con el control policial.

Perseguir y castigar el delito es un desafío mayor para las instituciones democráticas. Vale para los connotados de cuello y corbata que suelen recibir condenas irrisorias por sus millonarios desfalcos. Para las bandas del narcotráfico. También para “lanzas” y expertos en portonazos, tan privilegiados por las grabaciones televisivas. Sin olvidar la pendiente recuperación de la confianza ciudadana en su hoy desprestigiada policía uniformada (cómo superar efectos del Pacogate y su reciente descabezamiento del mando?). Continúa penando una urgente reforma estructural de Carabineros tras los tiempos críticos que han sacudido a la institución.

Perseguir y castigar el delito es un desafío mayor para las instituciones democráticas. Vale para los connotados de cuello y corbata que suelen recibir condenas irrisorias por sus millonarios desfalcos. Para las bandas del narcotráfico. También para “lanzas” y expertos en portonazos, tan privilegiados por las grabaciones televisivas. Sin olvidar la pendiente recuperación de la confianza ciudadana en su hoy desprestigiada policía uniformada (cómo superar efectos del Pacogate y su reciente descabezamiento del mando?). Continúa penando una urgente reforma estructural de Carabineros tras los tiempos críticos que han sacudido a la institución.

La mediática iniciativa de Piñera apuesta a tapar el sol con un dedo y sacar las castañas con la mano del gato. Las consecuencias de su pretendida nueva legislación contra el delito la pagarían incluso los ingenuos y bien intencionados que la respaldan agobiados por una delincuencia que no reconoce fronteras.

La mediática iniciativa de Piñera apuesta a tapar el sol con un dedo y sacar las castañas con la mano del gato. Las consecuencias de su pretendida nueva legislación contra el delito la pagarían incluso los ingenuos y bien intencionados que la respaldan agobiados por una delincuencia que no reconoce fronteras. 

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