El legado capitalista. Consumo viral y resistencia. Por Sergio Canals L.

por La Nueva Mirada

En política (como en los negocios) “sólo los paranoicos sobreviven”.
Dominga, LATAM, Litio ¿Qué tienen en común?  El dinero, primero.  
Pandemia =50.000 muertos (pobreza y vejez; marginados y vulnerables). Terceros y segundos en el mundo en número de vacunados y con refuerzos. Pero casi 1.000.000 sin esquemas de vacunación completos. Casi 300.000 menores entre 6 y 17 años, aún sin vacunación. Contagios de Ómicron tienden a subir exponencialmente. Comienza cuarta dosis de refuerzo = ¿Una buena gestión? (Es obvio imaginar: si yo no tuviera mis tres vacunas quizás, sólo quizás, me habría contagiado y en una de esas, estaría muerto, bien muerto).

Buena gestión. Sí, pero sólo económica, antes que política. Económica, antes que democrática. La economía antes que la vida.

¿Qué sucede con los territorios de pobreza y vulnerabilidad que no viajan a Miami? No se contagian con el virus viajero. Se contagian comunitaria y pobremente.

El “bien tener más”, por sobre el bien estar, el buen vivir y, sobre todo, el bien estar.

Comprar- Vender Comprar-Vender- Comprar- Vender- Comprar-Vender… Hasta la muerte.

Democracia amortajada.

Democracia violentada.

Cementerio sepulcral.

Comprar, Vender. Que el mundo se va a acabar.

(Ventiladores, vacunas, deudas de empresas, medio ambiente, bienes estratégicos, espacios personas y territorios…).

= Riquezas + Riquezas +Riquezas+ Riquezas +Riquezas+ Riquezas+ Más Riquezas+

Crecer y tener; crecer y tener; crecer y tener; crecer y tener; crecer y tener, y tener y crecer.

Más, Más, Más, Más, Mas, Más, Más, Más, Más, Más, Más, Más, Más, Más, Más

Pero sólo para los menos. ¿Menos, es Más? A veces.

 Los menos son menos.

“Confianza empresarial cae por tercer mes consecutivo”.

Prosperum Imposta Iter” (“Qué su viaje sea exitoso”) Lema de la próxima ENADE, el 13 de enero. ¿El viaje de quién? ¿Del nuevo presidente? ¿Del país? ¿De los empresarios? ¿Del gobierno?

¿Olvidan el primer principio? Lo que es bueno para el país y las personas, es bueno para los empresarios y no al revés.

El mundo empresarial tomó la posta de una ofensiva de la derecha política, débil y opaca. “Si los anuncios no corresponden a nuestros deseos, bajarán la confianza y las inversiones”. Presentarán un análisis sobre el proceso constitucional. En algunos medios, ya se habla de una “posible” nueva Constitución. El presidente de la CPC sube en su Twitter personal una carta abierta donde llama a apoyar Iniciativas Populares de Normas para la nueva constitución. Defiende valores: “La libertad de pensamiento, el valor de la propiedad privada, el libre emprendimiento, educación libre y diversa, la protección del medioambiente, la propiedad de los fondos de pensiones, la democracia robusta, la colaboración pública-privada entre otros”.

Concepto de propiedad privada: “Entendido como el derecho a usar un bien de usar un bien y disponer de toda la riqueza derivada de su posesión”. ¿Pierde cada vez más sentido?

Byung-Chul Han, plantea que “lo común se está derrumbando. La privatización se adentra hasta los confines del alma. El desmoronamiento de lo social hace que una actuación común sea muy improbable”. Lo escribió antes de octubre y noviembre. Antes de nuestra historia de “creación de comunidad, cooperación y comunicación”.

El poder económico, político empresarial no descansa. Pero (¿no son?) los que gobiernan y van a gobernar.

“Sería fatal precipitarse aún con más resolución en el movimiento del mercado y el capital. El “mundo” y el mundo del mercado no son lo mismo. La mercantilización del “mundo”, sería su profanación. Es expulsa todo lo que no sea trabajo, beneficio, capital, eficiencia y rendimiento”.

¿Su base? “La auto explotación de sí mismo”, donde los negocios “son ofrecidos absurdamente como lo más cercano a algo animado por la lívido”. La seguridad “como una oficina del alma sumamente consciente e iluminada las 24 horas del día”.

Para oponerse a esto, sólo existe la posibilidad de “desactivar el proceso diabólico que lo genera”. Librar una guerra con uno mismo. En el alma propia, con, para y desde el otro. Una batalla cooperativa en el océano de la “creación comunitaria”.

Difícil. Manejan una guerrilla comunicacional (educacional) en sordina sobre los flancos débiles del proyecto global de transformación.

 J. G. Ballard escribió en Milenio Negro (citado por Mark Fisher): “…los colegios privados lavan el cerebro a sus hijos para lograr una especie de docilidad social, para convertirlos en una clase profesional que dirigirá el espectáculo del capitalismo de mercado”. (Al igual que muchas universidades e instituciones educativas superiores). “¿El siniestro Gran Hermano?” “No hay ningún siniestro Gran Hermano. El sistema se regula de manera automática”.

La resistencia depende de nuestro sentido de responsabilidad civil y capacidad de generar cambios. Sin eso la sociedad se derrumbaría. De hecho, ¿puede haber empezado a derrumbarse? Derrumbarse-según Fisher- en medio de “una banalidad forzosa de su corrosivo nihilismo”, con el riesgo de que “la gran poética de ruptura (recién iniciada en nuestro país) (…) parezca sin significado y (sólo) atractivamente nostálgica”.

En desacoplar “…la seguridad de la clase media transformada en el horizonte de toda aspiración. En esta oficina del alma-sumamente consciente e iluminada las veinte y cuatro horas del día-, los negocios son ofrecidos absurdamente como lo más cercano a algo animado por la lívido.

En aceptar que hoy, en la democracia de los límites, siempre habrá algún grado de inseguridad y violencia en sus fronteras y transformaciones, como sucede en el mundo de la vida, las personas y, la realidad sociocultural en su flujo dinámico e histórica hacia la paz.  Violencia nunca moralmente aceptable, pero sí con la obligación de aprehenderla con una ética hermenéutica crítica. En esta visión humanista es imprescindible el diálogo con todos y todas sin exclusión. (E. Levinas, nos recuerda que además de la acción de justicia para castigar y proteger a un “tercero”, siempre “uno es responsable del otro, y de todos, ante todos, pero uno el primero de todos, aún de un asesino y su propio asesino”). Diálogo como una apertura silenciosa que habla siempre frente y en la debilidad y fragilidad del otro, en una búsqueda de un viaje común de la verdad y una humanidad muchas veces perdida.

Siempre a la búsqueda de lo absoluto. Es lo que nos define como seres humanos como libres y creadores en comunidad.

El futuro no emerge de la pura fantasía política, está inscripto en el presente. Sin embargo, no es inevitable, porque el presente existe en la oscilación entre innumerables oscilaciones” (F. Berardi)

(*)Colaboraron gentilmente: Mark Fisher “K-Punk-Volumen 1”; Byung- Chul Han “Topología de la Violencia; Franco “Fifo2 Berardi “Futurabilidad”

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