La elección de la mesa de la Cámara de Diputados fue de infarto para la convulsionada oposición. El conocido resultado de la primera votación, con triunfo de Jaime Bellolio anticipaba un descalabro de mayor desintegración.
Por ello la holgada victoria del moderado falangista Iván Flores – en segundo intento, de acuerdo a la normativa vigente- con 81 votos (mayor a la suma de diputados opositores, considerando la abstención de una minoría del Frente Amplio), acompañada de la elección en la mesa de la cámara baja del independiente Pepe Auth y la PPD, Loreto Carvajal, fue celebrada como virtual resurrección política opositora.
En rigor, el proceso de renovación de las autoridades de ambas Cámaras estuvo rodeado de suspenso luego que el Frente Amplio condicionara el cumplimiento del acuerdo administrativo suscrito por el conjunto de la oposición para elegir las autoridades del parlamento a la aprobación de mínimos comunes o acuerdos políticos para enfrentar la agenda gubernamental. Condición que fuera rechazada tajantemente por la DC, sin perjuicio de buscar acuerdos en torno a las materias más sensible para la oposición.
Ciertamente la tensión mayor se concentró en la elección de autoridades en la cámara baja, por la escasa incidencia del Frente Amplio en el Senado. No sólo por aquello. Es conocido que el PDC había designado, con mucha anticipación a Gabriel Silber como su carta a presidir la Cámara de Diputados en el próximo período. Sin embargo, un correo anónimo, dirigido a los parlamentarios de gobierno y oposición, acusando a Silber de supuestos actos de violencia intrafamiliar, obligaron al diputado a deponer su postulación, aún cuando negara enfáticamente las acusaciones, denunciando una maniobra política en su contra y presentando una querella por difamación en contra de los responsables.
Por ello la holgada victoria del moderado falangista Iván Flores – en segundo intento, de acuerdo a la normativa vigente- con 81 votos (mayor a la suma de diputados opositores, considerando la abstención de una minoría del Frente Amplio), acompañada de la elección en la mesa de la cámara baja del independiente Pepe Auth y la PPD, Loreto Carvajal, fue celebrada como virtual resurrección política opositora.
Probablemente no será una tarea muy compleja para la brigada del ciber crimen de la policía de Investigaciones, establecer el origen de este correo anónimo. En cualquier caso no resulta plausible que ello corresponda a una maniobra política. Ni desde el oficialismo y menos de la oposición pareciera tener algún sentido. Entonces las hipótesis apuntan a una “vendetta” personal en contra del parlamentario, cuyas razones se conocerían al identificar a los autores de este delito cibernético.
La aguda y prolongada crisis interna de la DC
El crítico episodio, junto con lesionar la honra del parlamentario y precipitar su renuncia, generó una natural tensión interna que, como consecuencia indirecta del origen del lamentado suceso, reveló una crisis mayor de liderazgo político al interior de la falange.
En torno al reciente episodio se volvió a manifestar la tensión entre los sectores identificados como “moderados”, que apoyan a la actual directiva presidida por Fuad Chaín, partidarios de una política de oposición constructiva, abierta al diálogo y la búsqueda de acuerdos con el gobierno, y aquellos “progresistas”, que ponen el énfasis en la condición de partido que privilegie la unidad opositora para enfrentar la agenda oficial.
El crítico episodio, junto con lesionar la honra del parlamentario y precipitar su renuncia, generó una natural tensión interna que, como consecuencia indirecta del origen del lamentado suceso, reveló una crisis mayor de liderazgo político al interior de la falange.
Es más que evidente que la DC arrastra una profunda y prolongada crisis interna, que no tan sólo ha generado dolorosas escisiones de algunas de sus figuras históricas (como el matrimonio Martínez-Alvear o Mariana Aylwin), sino marcadas diferencias acerca de cómo cumplir su rol como partido de oposición. Refiere a debates abiertos en torno a proyectos, liderazgos y confianzas internas, que su actual directiva no puede resolver, con tensiones evidentes en sus bancadas parlamentarias, especialmente la de senadores, que hoy tiene a Yasna Provoste como jefa de la bancada y a Francisco Huenchumilla, como principales contradictores de la conducción de Chaín.
En ese complejo contexto se resolvió la candidatura de Iván Flores para reemplazar la abortada postulación de Silber. Flores, representante de los sectores moderados, se impuso internamente por estrecho margen (7 a 4 diputados) a Víctor Torres, postulado por el “progresismo”. Finalmente Torres optó por aceptar esa mayoría relativa, sin condicionarlo a lo que se resuelva para un futuro período, cuando el propio Gabriel Silber pretende postular luego de esclarecer el confuso incidente que lo obligó a marginarse de la reciente elección.
Refiere a debates abiertos en torno a proyectos, liderazgos y confianzas internas, que su actual directiva no puede resolver, con tensiones evidentes en sus bancadas parlamentarias, especialmente la de senadores, que hoy tiene a Yasna Provoste como jefa de la bancada y a Francisco Huenchumilla, como principales contradictores de la conducción de Chaín.
Los problemas para el gobierno
La holgada mayoría de 81 votos alcanzada por Flores en la segunda votación (para la cual tan sólo requería mayoría simple) se presta para más de un comentario, toda vez que el Frente Amplio tan sólo garantizaba quince votos de los 21 que integran sus bancadas, luego de allanarse a no mantener la condición previa de suscribir los mínimos comunes, con un compromiso de la DC de trabajar en ellos luego de la elección.
Asumiendo las agresivas declaraciones de Pamela Hiles y la reiteración de Tomás Hirsch de la abstención de la pequeña bancada humanista, quedó abierta la interrogante respecto de diputados oficialistas que se habrían sumado en segunda instancia a la elección de Flores. Ello aumenta los ruidos internos en el oficialismo, en circunstancias que Piñera ejerce una sostenida presión para cohesionar su coalición en un año más que complejo para viabilizar la agenda más dura de su retardado programa de gobierno.
Asumiendo las agresivas declaraciones de Pamela Hiles y la reiteración de Tomás Hirsch de la abstención de la pequeña bancada humanista, quedó abierta la interrogante respecto de diputados oficialistas que se habrían sumado en segunda instancia a la elección de Flores. Ello aumenta los ruidos internos en el oficialismo, en circunstancias que Piñera ejerce una sostenida presión para cohesionar su coalición en un año más que complejo para viabilizar la agenda más dura de su retardado programa de gobierno.
Las propias declaraciones del senador de Renovación Nacional, Manuel José Ossandón, criticando la conducción política del mandatario, en lo que parece un intento por re posicionarse como futura opción presidencial, molestan a La Moneda, marcando señales de inquietud en torno a la cohesión oficialista para enfrentar este año decisivo.
Las propias declaraciones del senador de Renovación Nacional, Manuel José Ossandón, criticando la conducción política del mandatario, en lo que parece un intento por re posicionarse como futura opción presidencial, molestan a La Moneda, marcando señales de inquietud en torno a la cohesión oficialista para enfrentar este año decisivo.
El gobierno sabe que no la tiene fácil para viabilizar su controvertida agenda, que incluye el cuestionado proyecto de modernización tributaria, la reforma del sistema de pensiones y la contra reforma laboral, además de otros proyectos igualmente controversiales como el denominado proyecto de “Admisión Justa” que busca modificar la ley de inclusión escolar aprobada durante el anterior gobierno, o la rebaja de la edad para el control de identidad a mayores de 14 años, cuyo objetivo pareciera apostar a ganar puntos fáciles en las encuestas antes que tratarse de un instrumento eficaz en contra del delito.
Una pequeña victoria con proyección estratégica para la oposición?
Ciertamente la sufrida y accidentada victoria opositora en la elección de la nueva mesa de la Cámara de Diputados está muy lejos de resolver los agudos problemas que enfrenta el sector en su más amplia diversidad y heterogeneidad.
Ciertamente la sufrida y accidentada victoria opositora en la elección de la nueva mesa de la Cámara de Diputados está muy lejos de resolver los agudos problemas que enfrenta el sector en su más amplia diversidad y heterogeneidad.
Aquello vale tanto para enfrentar la agenda legislativa, como a próximos desafíos electorales, en donde el oficialismo ya trabaja de cara a la elección de gobernadores regionales, alcaldes, concejales y cores, con la mirada puesta en la próxima elección presidencial. Un debate que hasta ahora la oposición ha soslayado, consumida por el inmediatismo y las marcadas diferencias en su interior.
Pero, es igualmente evidente que la reciente elección de mesa en la Cámara de Diputados, favorece un espacio institucional para los acuerdos al interior de la oposición. Acuerdos que no serán fáciles de alcanzar no tan sólo por la diferencias políticas, ideológicas o programáticas en su interior, sino también por los esfuerzo tanto de la DC, para perfilarse en contraste con sus antiguos aliados de la izquierda y el progresismo, como del Frente Amplio. Incide también la propia tensión del Frente Amplio para proyectarse como alternativa a los bloques tradicionales y detener el avance de la derecha y la ultra derecha en el país.
Con todo, si tan sólo la oposición decidiera potenciar este espacio institucional para procesar sus diferencias y construir consensos mínimos enfrentando la agenda oficial con mayor pro actividad y generando nuevos espacios de diálogo para debatir los temas de futuro, ya habría dado un paso decisivo para su rearticulación.
Con todo, si tan sólo la oposición decidiera potenciar este espacio institucional para procesar sus diferencias y construir consensos mínimos enfrentando la agenda oficial con mayor pro actividad y generando nuevos espacios de diálogo para debatir los temas de futuro, ya habría dado un paso decisivo para su rearticulación. El resto, el tema de los pactos o acuerdos electorales bien se pueden dejar al indispensable realismo político. La división de la oposición tan sólo puede favorecer a la derecha. Con todo, no será tarea fácil conciliar la necesaria competencia política con la colaboración en el terreno electoral.
En cualquier caso, las primeras señales post elecciones de mesas directivas en el parlamento, como las condiciones mínimas para continuar el debate sobre reforma tributaria y el amplio rechazo a la presencia en Chile de Bolsonaro, restándose de la participación de autoridades parlamentarias en su recepción oficial, alientan las expectativas de una oposición más que urgida por recuperar su debilitada sintonía con los ciudadanos.
En cualquier caso, las primeras señales post elecciones de mesas directivas en el parlamento, como las condiciones mínimas para continuar el debate sobre reforma tributaria y el amplio rechazo a la presencia en Chile de Bolsonaro, restándose de la participación de autoridades parlamentarias en su recepción oficial, alientan las expectativas de una oposición más que urgida por recuperar su debilitada sintonía con los ciudadanos.