En la plataforma 8chan, de supremacistas blancos en Estados Unidos, alcanzó a registrarse el demencial fundamento de Patrick Crusius para la masacre ejecutada en la tienda Wallmart, con el objetivo manifiesto de eliminar tantos mexicanos como fuera posible.
En la plataforma 8chan, de supremacistas blancos en Estados Unidos, alcanzó a registrarse el demencial fundamento de Patrick Crusius para la masacre ejecutada en la tienda Wallmart, con el objetivo manifiesto de eliminar tantos mexicanos como fuera posible.
El asesino, según las autoridades policiales, había escrito aquel documento cargado de “odio, intolerancia y fanatismo”. En primera instancia, otro descerebrado se sumaba a la larguísima lista que, aprovechando el facilísimo acceso al porte de armas patrocinado por Donald Trump, ha transformado a la gran potencia del mundo en uno de los territorios más peligrosos para su población. El jefe de policía de El Paso, Greg Allen, cumplía con la rutina de informar de la existencia de un extenso justificativo de Crusius: ”Tenemos un manifiesto de este individuo que indica en cierto grado una conexión con un posible crimen de odio”
En primera instancia, otro descerebrado se sumaba a la larguísima lista que, aprovechando el facilísimo acceso al porte de armas patrocinado por Donald Trump, ha transformado a la gran potencia del mundo en uno de los territorios más peligrosos para su población.
La filtración del contenido de aquel manifiesto criminal, sustentado en el Supremacismo blanco, fue dando pié al inmenso impacto de lo que, en un comienzo, las autoridades asumían como un lamentable suceso que se sumaba al “terrorismo doméstico”, con que se acostumbra a convivir un segmento no menor de la población en tiempos de Trump.
La apología de Crusius al asesino de medio centenar de víctimas en los ataques de marzo en las mezquitas de Christchurch (Nueva Zelanda) aparecía asociada al fundamento de su acción criminal en Texas (que como otros estados del sur de Estados Unidos pertenecieron hasta siglo y medio atrás a México) resaltando su justificación para eliminar indeseables de aquel origen. Una masacre para realzar la “supremacía blanca”.
Aunque el criminal reivindicaba su cruzada blanca como previa a las más que difundidas diatribas de Trump contra migrantes “indeseables”, no hizo más que asumir el patrón argumental con que el locuaz mandatario inunda medios y redes sociales.
Aunque el criminal reivindicaba su cruzada blanca como previa a las más que difundidas diatribas de Trump contra migrantes “indeseables”, no hizo más que asumir el patrón argumental con que el locuaz mandatario inunda medios y redes sociales. Más que fresca está su agresión y basureo racista contra las congresistas estadounidenses, Alexandria Ocasio –Cortez; Ilhan Omar; Rashida Tlaib y Ayanna Presley, que tropezó con la más que contundente reacción de las afectadas y la polémica extendida en el marco de su adelantada campaña para la reelección presidencial. Por la boca muere el pez, sostienen los cuestionadores al racismo de Trump que hoy se ve impedido de bloquear a sus millones de críticos en Twitter.
Qué diferencias podría resaltar el mandamás de la Casa Blanca entre el escrito de Crusius y su habituales diatribas presidenciales? Más que desesperada fue su reacción para tomar distancia, condenar los recientes asesinatos y demandar la pena de muerte para el culpable de la mencionada masacre. Todo su aparataje comunicacional se activó para blanquear a Trump, tomando distancia de su vasta elocuencia racista de la que abundan pruebas al canto.
Qué diferencias podría resaltar el mandamás de la Casa Blanca entre el escrito de Crusius y su habituales diatribas presidenciales? Más que desesperada fue su reacción para tomar distancia, condenar los recientes asesinatos y demandar la pena de muerte para el culpable de la mencionada masacre. Todo su aparataje comunicacional se activó para blanquear a Trump, tomando distancia de su vasta elocuencia racista de la que abundan pruebas al canto.
Como era de esperar el presidente candidato culpó a los medios críticos de su gestión por “la ira y la furia que se han ido acumulando por muchos años” y se justificó contradictoriamente demandando que republicanos y demócratas se unieran para imponer “estrictos controles de antecedentes” de quienes compraban armas de fuego. Sin perder el tiempo hizo un intencionado vínculo con otra de sus obsesiones “quizás esto podría enlazarse con las reformas de leyes de inmigración que necesitamos desesperadamente”.
Trump les preguntó qué hacer con aquella lacra provocando el inmediato grito de uno de sus fanáticos seguidores: “Disparar contra ellos”. El presidente sonriendo le contestó “solo en Florida pueden decir una cosa así”.
En la propia prensa norteamericana no faltó el recuerdo del acto político en Florida, cuando hace pocos meses, en el marco de una audiencia bien alimentada con sus reiteradas amenazas a “invasores indocumentados que infestan nuestro país” Trump les preguntó qué hacer con aquella lacra provocando el inmediato grito de uno de sus fanáticos seguidores: “Disparar contra ellos”. El presidente sonriendo le contestó “solo en Florida pueden decir una cosa así”.
Difícil saber si Trump es un seguidor de la plataforma 8chan. El comentado suceso criminal parece marcar un hito inesperado e incómodo para su adelantada campaña a la reelección. De allí su desatada ofensiva comunicacional de los días recientes. Aún debe pasar mucha agua bajo el puente que conduce a esa contienda electoral del 3 diciembre del 2020.
En qué se diferencia la fobia racista de Trump y su furia contra los medios de comunicación críticos, con las del asesino Crusius para el que el mandatario pide hoy la pena de muerte? Aunque el asesino se sienta su precursor: “Mis opiniones sobre automatización, inmigración y demás anteceden a Trump y su campaña para presidente”. Estimulado por la misma fobia del mandatario adelantó que «los medios de comunicación son famosos por las noticias falsas. Su reacción a este ataque probablemente lo confirmará»….
Difícil saber si Trump es un seguidor de la plataforma 8chan. El comentado suceso criminal parece marcar un hito inesperado e incómodo para su adelantada campaña a la reelección. De allí su desatada ofensiva comunicacional de los días recientes. Aún debe pasar mucha agua bajo el puente que conduce a esa contienda electoral del 3 diciembre del 2020.
«la enfermedad mental y el odio son las que aprietan el gatillo, no la pistola». De sus labios se puede esperar cualquier cosa y como prueba al canto adivine usted quién declaró después del suceso criminal en El Paso: “Con una sola voz, nuestra nación debe condenar el racismo, el fanatismo y el supremacismo blanco».
En cualquier caso inquieta, más allá de esas fronteras que, según datos oficiales, el número de estadounidenses que han muerto desde aquel 11 de septiembre a manos de este tipo de ataques sea tanto mayor que los que han perdido la vida en actos asociados con el «terrorismo internacional». El terrorismo en tiempos de Trump adquiere nuevas connotaciones y para el mandamás de la Casa Blanca el análisis es más que simple, defendiendo el derecho a portar armas: «la enfermedad mental y el odio son las que aprietan el gatillo, no la pistola». De sus labios se puede esperar cualquier cosa y como prueba al canto adivine usted quién declaró después del suceso criminal en El Paso: “Con una sola voz, nuestra nación debe condenar el racismo, el fanatismo y el supremacismo blanco».
La reacción de los artistas
En el ámbito artístico los dichos de Trump caen en un vacío que lo condena sin eufemismos. Las 29 víctimas mortales en Texas y Ohio (días antes) no deja indiferentes y se suman los cuestionamientos: «Cuando condenamos el veneno racista que sale de la boca del presidente y señalamos la intolerancia de sus políticas, no se trata de una cuestión académica, no es un juego político, se trata de vida y muerte» (..) «El presidente inspira a los asesinos de manera regular. Él es parte del problema», escribió John Legend, cantante y compositor.
«El presidente inspira a los asesinos de manera regular. Él es parte del problema», escribió John Legend, cantante y compositor.
La cantante y actriz Cardi B interpeló a Trump «Las autoridades policiales actuaron de manera rápida pero ¿qué está haciendo usted para controlar a sus partidarios racistas?»
La cantante Rihanna fue elocuente:»Imagínense un mundo donde es más fácil obtener una Ak 47 que una visa». «¿Por qué está usted horrorizado?», preguntó el actor Andy Richter al presidente del Senado, el republicano Mitch McConnell, luego que éste lamentara los tiroteos. Refutando al parlamentario añadió: «Éste es, exactamente, el tipo de cosas que usted, especial y específicamente facilita. Es su propio interés que, cobardemente, permite que ocurran estas matanzas. Guárdese sus oraciones. A usted no le corresponde el duelo. Usted debería sentir solo vergüenza»,
La cantante Rihanna fue elocuente:»Imagínense un mundo donde es más fácil obtener una Ak 47 que una visa».
La actriz Julianne Moore dijo: «Cuando me fui a dormir anoche, cientos de voluntarios y voluntarias marchaban en Washington DC después del horrible tiroteo en El Paso. Cuando me desperté, había habido otro tiroteo trágico en Dayton. Mi ira está exhausta, reemplazada por la resolución de poner fin a la violencia con armas de fuego», añadió.
El actor Kevin Bacon apuntó que la Asociación Nacional del Rifle «dona cada año millones de dólares a los republicanos, incluido Donald Trump, y por eso nada se hará después del tiroteo en Dayton».
El actor Patton Oswalt señaló que, después del ataque armado en El Paso se siente «optimista por una razón muy enfermiza». «A los macabros del Partido Republicano y la Asociación Nacional del Rifle no les conmueven los niños, musulmanes, mujeres, homosexuales muertos o cualquier otro ser vivo bajo el sol», comentó. «Pero si las ganancias de Walmart sufren… podríamos ver alguna acción».
El actor Kevin Bacon apuntó que la Asociación Nacional del Rifle «dona cada año millones de dólares a los republicanos, incluido Donald Trump, y por eso nada se hará después del tiroteo en Dayton».
Las reacciones ante las masacres que conmueven al planeta son disímiles. Con todo, la interrogante está abierta ¿Son el asesino y el indignado Trump dos astillas del mismo palo?