Manuela Gumucio
Directora de Fucatel.
Telesur, que puede ser visto en DirecTV de Chile, es un canal especializado en América Latina y en su noticiario del día 27 de agosto pasado, difundió una nota ( ver video abajo) refiriéndose a la grave crisis provocada por la sequía en nuestro país. En ella podemos ver, de manera fehaciente, cómo se nos oculta información y mientras se clama por agua, el Estado chileno pone a remate el río Renaico, en Collipulli, para construir una nueva hidroeléctrica.
La nota sostiene que la emergencia agrícola que alarma al país, no es solo fruto del cambio climático, sino también de la depredadora acción de algunas empresas y de la privatización del agua, impuesta por el Código de Aguas de la dictadura, aún vigente.
La nota sostiene que la emergencia agrícola que alarma al país, no es solo fruto del cambio climático, sino también de la depredadora acción de algunas empresas y de la privatización del agua, impuesta por el Código de Aguas de la dictadura, aún vigente.
La modificación de dicho código no hace parte de la lista de medidas que está tomando el Gobierno. De ello poco se habla en los medios chilenos, denuncia Telesur. En cambio se pone el acento en los estragos del medio ambiente y, salvo algunas intervenciones de Green Peace y movimientos ciudadanos en canales de cable de baja audiencia, el remate del río no está a la “una” de los diarios y canales de TV. Ellos dan cuenta, a coro, de la causa medioambiental.
Al ver este escandaloso contraste entre los medios chilenos y este canal extranjero, cabe también preguntarse si todas las versiones sobre lo que ocurre en Venezuela corresponden a la realidad, independiente de lo que se pueda pensar sobre el régimen de ese país.
Telesur es un canal que pertenece a los estados de Cuba, Nicaragua, Venezuela y Uruguay. Ignorado en buena parte de los medios del mundo es el único que muestra información sobre toda América Latina. Se puede tener una visión crítica de Telesur, como de muchos otros medios, pero es un dato la desinformación y mala información aportada por los medios de comunicación chilenos. Ciertamente ello es producto de una crisis tanto o más importante que la sequía: la concentración de la propiedad de los medios chilenos, propia de los países autoritarios. Desde hace tiempo, esta situación espanta a los observadores de las democracias establecidas en el mundo.
Se puede tener una visión crítica de Telesur, como de muchos otros medios, pero es un dato la desinformación y mala información aportada por los medios de comunicación chilenos. Ciertamente ello es producto de una crisis tanto o más importante que la sequía: la concentración de la propiedad de los medios chilenos, propia de los países autoritarios. Desde hace tiempo, esta situación espanta a los observadores de las democracias establecidas en el mundo.
