Eres el innombrable por los precandidatos de la derecha, el “convidado de piedra” que intenta entrar por la ventana a la Convención Constituyente, un frustrado en viajar por el planeta y no te queda otra que abusar de la cadena como “vacunador” nacional…¿Cuándo la tiras?
Tuvo razón Cecilia en apagarte la tele a la hora de los debates televisivos de candidatos a primarias presidenciales. En la derecha compiten exministros de tus administraciones y todos eludieron mencionarte. Eras el ”innombrable” y como chupamedias malagradecidos competían por mostrarse como “no escuchados” o distantes de tus múltiples errores y horrores de gran tacaño.
“Cría cuervos y te sacarán los ojos” repite Cecilia sin poder dormir y no deja de tener razón. Sólo tu protegido Larroulet continúa jugando al ajedrez del poder palaciego en las sombras. Él nunca será candidato a elecciones que desprecia desde sus orígenes fascistoides al alero de Pinochet. Confiaste en su “buen ojo” y así estás de jodido, mientras él continúa apostando en las lides del poder, ahora favoreciendo al oportunista de turno, al que viene cambiando de colores como buen camaleón. Donde haya billete fácil verán ponerse en la foto a Sebastián Sichel. Para más desgracia homónimo repite Cecilia…
¿Te sorprende que Allamand y tu primo Chadwick también lo apoyen? Poco importa si la frase es de Sherlock Holmes o no – harina de otro costal- pero valga un “Elemental querido Watson” para entenderlos. Lo encuentran Bueno, Bonito y Barato, coincidiendo con apostadores empresariales que lo vienen favoreciendo con gastos para sus cuentas. Apuestan al desgaste “socialdemócrata” de un ridículo Lavín y, por cierto, al desplome del “ordinario” Desbordes, que ha transado con los izquierdistas y al que Carlos Larraín y sus empleados se la tienen “jurada”(¿o no Chahuán?)
Te cuesta entender Sebastián y a estas alturas lo que natura non da, las pastillas tampoco…Estás sobrando hace un buen rato. La Convención Constituyente – contra la que votaste cuando andabas tan perdido como el teniente Bello – no te necesita ni para una foto. No tienes equipo de recambio en un gabinete con un vocero tan necesitado de píldoras como tú.
Entonces inventas todos los días un pretexto para abusar de la aborrecida cadena televisiva. Hasta el enano Paris se te va en collera…y, en una de ésas, es capaz de terminar haciéndote un Mañolich…
Sebastián tranquilízate y disfruta tu logro del matrimonio homoparental…¿O se te olvidó que esa cuenta también te la quieren cobrar los que insisten en tirarte la cadena en la propia Moneda?
Hasta la próxima y vacunen a hijo(a)s y nieto(a)s. ¿O necesitan que Sebastián lo repita?
Frank Kotermann